viernes, 13 de noviembre de 2009

Timebox: ¿estudias y trabajas?















¿Cuántos jóvenes universitarios conocemos que, a parte de dedicarle tiempo a su estudio, forman parte del mundo laboral? Esta juventud de la que tenemos conciencia, ¿es realmente capaz de ocuparse al 100% de ambas obligaciones? Actualmente es un tema que está muy en boga.



Este es el caso de un buen amigo mio, por ejemplo. Jaime es un universitario que cursa tercero de ADE y estudia guiado, de pies a cabeza, por el plan Bolonia. Eso conlleva a tener un horario fijo de clases de asistencia obligatoria y exámenes parciales a lo largo del semestre. Sin olvidar las múltiples horas de prácticas, que pueden ir variando, y los trabajos y seminarios que uno se debe preparar a con tiempo.




Jaime, tiene clases de 8am a 14pm y prácticas dos días a la semana de 16pm a 18pm. Cada semana debe entregar un trabajo de cada una de las cinco asignaturas que cursa. Es decir, es una persona que en una semana tiene como tareas obligatorias: asistir a clases, ir a las prácticas, efectuar el trabajo para la semana siguiente, estudiar para los parciales (sin dejar de lado los finales)... Si la vida de Jaime acabará aquí, podríamos darle un fantástico plan de estudio para su organización. La cuestión es que Jaime sigue sorprendiéndonos con su rutina atareada. Cada día de 20pm a 24pm se dedica a repartir pizzas por la ciudad. Lo cual, inevitablemente, hace que como mínimo se acueste a la 1am cada día. Aunque sea joven (21 años), su cuerpo le pide descanso para rendir con los estudios, y con solo siete horas de sueño no llega al nivel esperado.



A primera vista resulta bastante estresante y agobiante. Parece que el pobre chico se vaya a derrumbar de un momento a otro y de que será incapaz de seguir con esta vida. De hecho, así era Jaime antes de encontrarnos. Cuando descubrió el magnífico y útil timebox su vida dio un giro de noventa grados. ¿Cómo es posible?, algunos se preguntarán. Sencillo.

Ahora actúa con sensatez priorizando sus tareas. Sus horas de trabajo le restan tiempo para dedicárselo a sus estudios, aún así, en las mismas horas de clase, si presta atención al 100%, tiene un alto porcentaje de materia aprendida. Las horas sueltas que tiene para estudiar le cuenden en gran medida, ya que sigue escrupulosamente un horario de estudio. De esta manera, ahorra tiempo en pensar qué debe estudiar en cada momento. Por otro lado, no anula su vida social, las horas de las comidas las comparte con amigos y familiares. La vida social de un joven es muy importante aun teniendo un horario algo apretado.

Timebox es una buena ayuda que conciencia del tiempo y ayuda con sus consejos. Como su propio nombre indica, es una caja que te muestra tiempo antes inexistente a tu parecer. Jaime es un buen ejemplo de ello, como él mismo dice: 'Con solo proponértelo tendrás tiempo para todo y te darás cuenta de qué significa que el día tenga 24horas'.

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